Busquemos tiempo para descansarMuestra

¿Qué significa descansar?

Pareciera que con el paso de los meses nuestras agendas están cada vez más llenas. Cuando intentamos encontrar una fecha para juntarnos con nuestros amigos, nos llevamos la sorpresa de que la próxima noche que tenemos disponible es dentro de más de un mes. Están las actividades de los niños, los eventos en la iglesia, los proyectos en el trabajo, las fiestas de cumpleaños y las vacaciones de verano. Hemos programado y planificado cada detalle de nuestra vida de tal forma que nos quedamos sin margen para hacer ninguna cosa que nos rejuvenezca o nos permita descansar.  

Con demasiada frecuencia pensamos que descansar significa que deberíamos ser unos vagos, que se trata de pasar el rato en casa sin hacer absolutamente nada. Aunque puede haber algo de esto en nuestros ratos de descanso, eso es tan solo una parte de la historia. 

Descansar es recuperación.

Es darnos de cuenta de que estamos agotados y exhaustos, y que necesitamos dedicar un tiempo a respirar hondo. Es reconocer nuestros límites y entender cómo estamos lidiando con las demandas del día a día. Para que nuestros cuerpos se recuperen de verdad, necesitamos descansar en abundancia, lo que incluye dormir bien por las noches. Si nos sentimos siempre cansados, sería prudente dedicar tiempo a evaluar no solo la cantidad de horas que dormimos, sino también el horario concreto en que lo hacemos.

Descansar es revitalización. 

Es aprender qué cosas nos dan energía y cuáles nos la quitan. Es elegir hacer las actividades o practicar la quietud que nos revitalizará. Si seguimos haciendo cosas que nos agotan en lugar de hacer las que nos llenan, nunca nos sentiremos revitalizados. Durante nuestro tiempo de descanso, debemos asegurarnos de llenar nuestro depósito en lugar de vaciarlo.

Descansar es renovación. 

Es experimentar una renovación profunda en cada ámbito de nuestras vidas. Es pasar tiempo con Dios para que nos renueve espiritualmente. Es cierto que hay cosas que nos encanta hacer para renovar nuestras mentes, pero, en última instancia, necesitamos renovar nuestro espíritu pasando tiempo con Dios cada día. 

Durante los próximos cuatro días vamos a descubrir varias maneras de encontrar descanso para nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestro espíritu. Aprenderemos a incorporar rutinas que se convertirán en hábitos diarios. Al hacerlo, conseguiremos eliminar el agotamiento mental, emocional, espiritual y físico de nuestras vidas.

Reflexiona

• Cuando piensas en descansar, ¿sientes que es algo imposible para ti? 


• ¿En qué área de tu vida piensas que debes descansar más? ¿Mente, cuerpo o espíritu?


• Anota cualquier cosa que te inspire Dios hoy a través de la lectura de la Biblia o del devocional.