Ayuna como DanielMuestra

Este no es el final

¡Oh sí! Día 21 ¡CHÓCALA! ¡Lo lograste! Estoy muy emocionado de estar escribiendo esto y aún más emocionado de que lo estés leyendo, porque eso significa que has pasado 21 días acercándote más a Dios. No puedo esperar a que veas lo que Él hace en tu vida siguiendo este comienzo en las aguas más profundas de conocerlo. 

Si una situación difícil, una necesidad de avanzar, o un genuino deseo de acercarte más a Dios te llevaron a este ayuno, ¡asegúrate de caminar con valentía y deja que la voz de la fe silencie las voces del miedo! Recuerda, el temor no es de Dios porque Él no te ha dado el espíritu de temor. En el futuro, debes sumergirte en las aguas profundas de la vida—esperando que algo sorprendente esté a punto de suceder. 

¿Por qué? Porque tuviste la fe de salir del bote.

Pedro es famoso por hundirse cuando Jesús vino caminando sobre el agua para encontrarse con Sus discípulos. Todos se mojaron—11 con la lluvia, y Pedro en el mar—¡pero al menos Pedro tuvo las agallas de salir del bote! El resto de ellos se quedó allí.

Te mojaste los pies a través del ayuno como Daniel, y te digo que no importa lo que haya inspirado este ayuno, Dios tiene tu avance en el camino. Recuerda tu “Educación Física de la Escuela Secundaria.”—permanece HUMILDE, sometiendo tu voluntad a la suya; pidiendo por necesidades ESPECÍFICAS de acuerdo a Su palabra; mantente PERSISTENTE en la oración, aún cuando no veas los resultados de inmediato; y cultiva una EXPECTATIVA esperanzada en que Dios va a aparecer, no importa cuánto tiempo tome.

Sea lo que sea por lo que estés orando y ayunando, Jesús pagó el precio completo en el Calvario. El trabajo está hecho. No estás ganando nada; estás recibiendo Sus dones gratuitos de gracia.

Te dejo con la lectura de hoy, algunos de los mejores consejos que el Apóstol Pablo dio, para que puedas aprovechar el momento que has iniciado durante estos 21 días. 

Este no es el final. Es solo el comienzo. 

Realmente quiero escuchar sobre lo que Dios hace en tu vida en los próximos días, semanas, y meses. Visitawww.FastLikeDaniel.com para obtener recursos adicionales, y ¡asegúrate de compartir tu historia sobre las cosas maravillosas que suceden cuando ayunamos como Daniel! 

Tuviste las agallas para salir del bote. ¡Ahora es tiempo de guiar a otros para que se acerquen más a Dios!