Mis ojos se esfuerzan por ver tu rescate, por ver la verdad de tu promesa cumplida. Soy tu siervo; trátame con tu amor inagotable y enséñame tus decretos. Da discernimiento a este siervo tuyo; entonces comprenderé tus leyes. SEÑOR, es tiempo de que actúes, porque esta gente malvada ha desobedecido tus enseñanzas. De verdad, amo tus mandatos más que el oro, incluso que el oro más fino. Cada uno de tus mandamientos es recto; por eso detesto todo camino falso.
Share
Read Salmos 119
Save verses, read offline, watch teaching clips, and more!
YouVersion uses cookies to personalize your experience. By using our website, you accept our use of cookies as described in our Privacy Policy
Home
Bible
Plans
Videos