Romanos 9:22-26
Romanos 9:22-26 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
¿Y qué si Dios, queriendo mostrar su ira y dar a conocer su poder, soportó con mucha paciencia a los que eran objeto de su castigo y estaban destinados a la destrucción? ¿Qué si lo hizo para dar a conocer sus gloriosas riquezas a los que eran objeto de su misericordia, y a quienes de antemano preparó para esa gloria? Esos somos nosotros, a quienes Dios llamó no solo de entre los judíos, sino también de entre los no judíos. Así lo dice Dios en el libro de Oseas: «Llamaré “mi pueblo” a los que no son mi pueblo; y llamaré “mi amada” a la que no es mi amada». «Y sucederá que en el mismo lugar donde se les dijo: “Ustedes no son mi pueblo”, serán llamados “hijos del Dios viviente”».
Romanos 9:22-26 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Algo parecido ha hecho Dios. Ha querido dar un ejemplo de castigo, para que todo el mundo conozca su poder. Por eso tuvo mucha paciencia con los que merecían ser castigados y destruidos. Al mismo tiempo, demostró su gran amor y poder para salvarnos. Desde un principio nos tuvo compasión, y nos eligió para vivir con él. Y no le importó que fuéramos judíos o no lo fuéramos. Como dice Dios en el libro del profeta Oseas: «A un pueblo que no me pertenece, lo llamaré mi pueblo. A un pueblo que no amo, le mostraré mi amor. »Y allí donde les dije: “Ustedes no son mi pueblo”, les diré: “Ustedes son mi pueblo, porque yo soy el Dios de la vida.”»
Romanos 9:22-26 Reina Valera Contemporánea (RVC)
¿Y qué si Dios, queriendo mostrar su ira y dar a conocer su poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira que estaban preparados para destrucción? ¿Y qué si, para dar a conocer las riquezas de su gloria, se las mostró a los vasos de misericordia que él de antemano preparó para esa gloria? Esos somos nosotros, a quienes Dios llamó, no solo de entre los judíos, sino también de entre los no judíos. Como también se dice en Oseas: «Llamaré “pueblo mío” al que no era mi pueblo, y llamaré “amada mía” a la que no era mi amada. Y en el lugar donde se les dijo: “Ustedes no son mi pueblo”, allí serán llamados “hijos del Dios viviente”.»
Romanos 9:22-26 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Dios, queriendo dar un ejemplo de castigo y mostrar su poder, soportó con mucha paciencia a aquellos que merecían el castigo e iban a la perdición. Al mismo tiempo quiso dar a conocer en nosotros la grandeza de su gloria, pues nos tuvo compasión y nos preparó de antemano para tener parte en ella. Así que Dios nos llamó, a unos de entre los judíos y a otros de entre los no judíos. Como se dice en el libro de Oseas: «A los que no eran mi pueblo, los llamaré mi pueblo; a la que no era amada, la llamaré mi amada. Y en el mismo lugar donde se les dijo: “Ustedes no son mi pueblo”, serán llamados hijos del Dios viviente.»
Romanos 9:22-26 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
¿Y qué, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira preparados para destrucción, y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria, a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no solo de los judíos, sino también de los gentiles? Como también en Oseas dice: Llamaré pueblo mío al que no era mi pueblo, Y a la no amada, amada. Y en el lugar donde se les dijo: Vosotros no sois pueblo mío, Allí serán llamados hijos del Dios viviente.
Romanos 9:22-26 La Biblia de las Américas (LBLA)
¿Y qué, si Dios, aunque dispuesto a demostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia a los vasos de ira preparados para destrucción? Lo hizo para dar a conocer las riquezas de su gloria sobre los vasos de misericordia, que de antemano Él preparó para gloria, es decir, nosotros, a quienes también llamó, no solo de entre los judíos, sino también de entre los gentiles. Como también dice en Oseas: A LOS QUE NO ERAN MI PUEBLO, LLAMARé: «PUEBLO MíO», Y A LA QUE NO ERA AMADA: «AMADA mía». Y ACONTECERá QUE EN EL LUGAR DONDE LES FUE DICHO: «VOSOTROS NO SOIS MI PUEBLO», ALLí SERáN LLAMADOS HIJOS DEL DIOS VIVIENTE.
Romanos 9:22-26 Nueva Traducción Viviente (NTV)
De la misma manera, aunque Dios tiene el derecho de mostrar su enojo y su poder, él es muy paciente con aquellos que son objeto de su enojo, los que están destinados para destrucción. Lo hace para que las riquezas de su gloria brillen con mucha más intensidad sobre aquellos a quienes les tiene misericordia, los que preparó de antemano para gloria. Y nosotros estamos entre los que él eligió, ya sea del grupo de los judíos o de los gentiles. Con respecto a los gentiles, Dios dice en la profecía de Oseas: «A los que no eran mi pueblo, ahora los llamaré mi pueblo. Y amaré a los que antes no amaba». Y también dice