Proverbios 8:5-12
Proverbios 8:5-12 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Ustedes los inexpertos, ¡adquieran prudencia! Ustedes los necios, ¡obtengan discernimiento! Escúchenme, que diré cosas importantes; mis labios hablarán lo correcto. Mi boca expresará la verdad, pues mis labios detestan la maldad. Las palabras de mi boca son todas justas; no hay en ellas maldad ni perversidad. Son claras para los entendidos e irreprochables para los sabios. Opten por mi instrucción, no por la plata; por el conocimiento, no por el oro refinado. Vale más la sabiduría que las piedras preciosas y ni lo más deseable se le compara. »Yo, la sabiduría, convivo con la prudencia y poseo conocimiento y discreción.
Proverbios 8:5-12 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Jovencitos ignorantes, muchachitos inexpertos, ¡piensen bien lo que hacen! Préstenme atención, pues voy a decirles algo importante; no me gusta la mentira ni tampoco la hipocresía, siempre digo la verdad. La gente que sabe entender reconoce que mis palabras son justas y verdaderas. No busquen las riquezas, mejor busquen mis enseñanzas y adquieran mis conocimientos, pues son más valiosos que el oro y la plata. ¡Los más ricos tesoros no se comparan conmigo! »Yo soy la sabiduría, y mi compañera es la experiencia; siempre pienso antes de actuar.
Proverbios 8:5-12 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Muchachos ingenuos, ¡entiendan! Jóvenes necios, ¡recapaciten! ¡Óiganme, que lo que voy a decirles son cosas muy justas e importantes! De mi boca solo sale la verdad; mis labios aborrecen la mentira. Todas mis palabras son precisas; no hay en ellas dolo ni perversidad. Para los sabios y entendidos, todas ellas son contundentes y razonables. Den cabida a mis correcciones, no a la plata; acepten mis conocimientos, no el oro escogido. Yo, la sabiduría, valgo más que las piedras preciosas. ¡Ni lo más deseable puede compararse conmigo! »Yo, la sabiduría, convivo con la cordura; en mí se hallan el conocimiento y el consejo.
Proverbios 8:5-12 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Jóvenes inexpertos y necios, ¡aprendan a ser prudentes y entendidos! Atiendan, que voy a decirles cosas importantes e irreprochables. Lo que voy a decir es la verdad; no me gusta hablar mentira. Todas mis palabras son justas; no hay en ellas la menor falsedad. Para el inteligente y entendido, mis palabras son claras e irreprochables. En vez de plata y oro fino, adquieran instrucción y conocimiento.» Vale más sabiduría que piedras preciosas; ¡ni lo más deseable se le puede comparar! «Yo, la sabiduría, habito con la inteligencia, y sé hallar los mejores consejos.
Proverbios 8:5-12 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Entended, oh simples, discreción; Y vosotros, necios, entrad en cordura. Oíd, porque hablaré cosas excelentes, Y abriré mis labios para cosas rectas. Porque mi boca hablará verdad, Y la impiedad abominan mis labios. Justas son todas las razones de mi boca; No hay en ellas cosa perversa ni torcida. Todas ellas son rectas al que entiende, Y razonables a los que han hallado sabiduría. Recibid mi enseñanza, y no plata; Y ciencia antes que el oro escogido. Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todo cuanto se puede desear, no es de compararse con ella. Yo, la sabiduría, habito con la cordura, Y hallo la ciencia de los consejos.
Proverbios 8:5-12 La Biblia de las Américas (LBLA)
Oh simples, aprended prudencia; y vosotros, necios, aprended sabiduría. Escuchad, porque hablaré cosas excelentes, y con el abrir de mis labios rectitud. Porque mi boca proferirá la verdad, abominación a mis labios es la impiedad. Conforme a la justicia son todas las palabras de mi boca, no hay en ellas nada torcido ni perverso. Todas son sinceras para el que entiende, y rectas para los que han hallado conocimiento. Recibid mi instrucción y no la plata, y conocimiento antes que el oro escogido; porque mejor es la sabiduría que las joyas, y todas las cosas deseables no pueden compararse con ella. Yo, la sabiduría, habito con la prudencia, y he hallado conocimiento y discreción.
Proverbios 8:5-12 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Ustedes, ingenuos, usen el buen juicio. Ustedes, necios, muestren un poco de entendimiento. ¡Escúchenme! Tengo cosas importantes que decirles. Todo lo que digo es correcto, pues hablo la verdad y detesto toda clase de engaño. Mi consejo es sano; no tiene artimañas ni falsedad. Mis palabras son obvias para todos los que tienen entendimiento, claras para los que poseen conocimiento. Elijan mi instrucción en lugar de la plata y el conocimiento antes que el oro puro. Pues la sabiduría es mucho más valiosa que los rubíes. Nada de lo que uno pueda desear se compara con ella. »Yo, la Sabiduría, convivo con el buen juicio. Sé dónde encontrar conocimiento y discernimiento.