A ti, Señor, clamo; a mi Señor suplico. ¿Qué provecho hay en mi muerte, en que yo baje a la tumba? ¿Podrá alabarte el polvo? ¿Anunciará él tu fidelidad? ¡Escucha, Señor, ten compasión de mí; Señor, ven en mi ayuda! Convertiste mi llanto en danza, me despojaste del luto, me vestiste de fiesta para que te cante sin callar nunca; Señor, Dios mío, te alabaré por siempre.
Lee SALMOS 30
Compartir
Comparar todas las versiones: SALMOS 30:8-12
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira clips de enseñanzas y más!
YouVersion utiliza cookies para personalizar su experiencia. Al usar nuestro sitio web, acepta nuestro uso de cookies como se describe en nuestra Política de privacidad
Inicio
Biblia
Planes
Vídeos